El trabajo, por parte del equipo de programación, ya estaba hecho. El Festival de Sevilla del año 2021 seguramente será recordado, aparte de por la recuperación de cierta normalidad post-pandémica, por la apabullante alineación de astros conjurada en una Sección Oficial ciertamente escandalosa. La patata caliente se la tuvieron que comer Ingvar Sigurdson, y Christian Petzold, y Cristos Nikou, y Cristina Hergueta, y María del Puy Alvarado Landa.
En este jurado recayó la responsabilidad de configurar un palmarés que, como siempre pasa en estos casos, ya se sabía de antemano que le iban a faltar huecos para poder premiarlo todo. Y así fue: por increíble que parezca, nombres tan ilustres o con tanta proyección como Apichatpong Weerasethakul, Nanni Moretti, Michelangelo Frammartino, Santi Amodeo, Mia Hansen-Løve, Chema García Ibarra o Miguel Gomes se fueron de la cita, como quien dice, sin que les dieran ni las gracias.
Otro de los que a priori partía como uno de los principales favoritos, Alexandre Koberize, tuvo que conformarse con el Premio a la Mejor Fotografía, otorgado a la preciosa labor de Faraz Fesharaki en la aún más maravillosa ¿Qué vemos cuando miramos al cielo?
Entonces, ¿quién se quedó con la gloria? El Giraldillo de Oro a la Mejor Película fue, efectivamente, para uno de los mejores títulos de la Competición: Great Freedom, del austríaco Sebastian Meise. Una sorpresa (teniendo en cuenta la batalla de altísimos vuelos que se había instalado en la Sección Oficial) pero en ningún caso una decisión que nos hiciera torcer el gesto. Al fin y al cabo, el jurado reconoció el valor, la tenacidad y la sensibilidad perfectamente afinadas de un drama carcelario en el que todo brillaba con una discreción emocionante.
La encarnación de estas virtudes se concentraron, como cabía esperar, en el intérprete actualmente de moda en el panorama europeo: Franz Rogowski, apabullante protagonista de una función decidida a denunciar la criminalización que sufrió el colectivo homosexual en la Alemania post-Segunda Guerra Mundial. Viaje al pasado bañado de amargura… pero también de un calor humano capaz de iluminar los agujeros más oscuros de nuestra sociedad. Perfecto balance emocional refrendado además con una filmación excepcional. Una perfecta conjunción entre arte y técnica, vaya, que por si todo esto fuera poco, también recibió el Premio ASECAN.
La otra gran triunfadora de este palmarés fue otra propuesta que a priori llegaba con la condición de tapada. Onoda, la aventura bélica japonesa del francés Arthur Harari, se hizo con el Gran Premio del Jurado, ex aequo junto a Costa Brava, Líbano de Mounia Akl (co-escrita esta por Clara Roquet, por si también había dudas del gran año de la directora y guionista catalana). Esta película sobre el agónico y absurdo ejercicio de resiliencia por parte de un soldado nipón que siguió luchando la Segunda Guerra Mundial décadas después de que esta terminara, conquistó también el Premio al Mejor Guion, firmado por el propio director y por Vincent Poymiro.
Siguiendo la senda de las grandes ganadoras, encontramo Para Chiara, de Jonas Carpignano, contundente culminación de una trilogía iniciada con Mediterranea y A Ciambra. La película se hizo con el Premio a la Mejor Dirección, y también con una muy merecida Mención Especial a su elenco, capitaneado por Nina Fumo, Swami Rotolo, Carmela Fumo y Claudio Rotolo. Completaron el palmarés de esta espectacular Sección Oficial primero el Premio a la Mejor Actriz para la revelación de Lucie Whang en París, distrito 13, de Jacques Audiard, y después el Premio AC/E (Acción Cultural Española) a la Mejor Dirección de Película Española, que fue para David Pantaleón y su Rendir los machos.
Mientras, la sección Las Nuevas Olas se resolvió con el Premio a la Mejor Película para Moon, 66 Questions, de la griega Jacqueline Lentzou, el Premio Especial para Abrázame fuerte, de Mathieu Amalric, el ex aequo en la Mejor Película de de No Ficción, que fue para The Story of Looking, de Mark Cousins y para Babi Yar. Context, de Sergei Loznitsa, y el Reconocimiento Especial para Landscapes of Resistance, de Marta Popivoda.
El Premio a la Mejor Película de la Sección Revoluciones Permanentes fue para Ghost Song, de Nicolas Peduzzi. En Panorama Andaluz, el Premio a la Mejor Película fue para ¡Dolores, guapa!, de Jesús Pascual, mientras que la Mención Honorífica fue para Pico reja, lo que la tierra esconde, de Remedios Malvárez y Arturo Andújar.
En esta misma sección, el Premio Rosario Valpuesta al Mejor Cortometraje fue para El Productor (Juanma Suárez) y el de la Contribución Artística fue para Farrucas (Ian de la Rosa). Además, el XIV Premio Europeo de Cine-Guion Cinematográfico Universidad de Sevilla Año 2021 fue para En la noche caminamos solos, de Rafa Alberola (categoría de Ficción) y para Currulao.
Los Premios del Público fueron para Piccolo corpo, de Laura Samani (en la sección Historias extraordinarias) y para La peor persona del mundo, de Joachim Trier (en la sección Selección EFA). Por último, la Mejor Dirección de primer o segundo largometraje europeo fue para Marta Popivoda y su Landscapes of Resistance, el Premio Cinéfilos del Futuro se lo llevó The Horizon, de Emilie Carpentier y el Premio Europa Junior fue para El secreto de Vicky, de Denis Imbert.