Su 25ª edición promete pasar a la historia del festival

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16 Mar 2022
Carlos Loureda
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Algo huele muy bien en la comunidad autónoma con más cines de España (645 salas, delante de Cataluña con 612 y Madrid con 519, según datos oficiales). El cine adora la luz y Andalucía dispone del mayor número de horas de sol de toda la península. Esto no es Dinamarca y se nota hasta en el patio de butacas.

No solo la iluminación cuenta en la industria cinematográfica, la clarividencia, la estrategia y una hoja de ruta bien diseñada del conjunto de las instituciones andaluzas, en un claro, continuado y firme apoyo y respaldo al sector, están siendo indispensables para este sector tan cambiante, y al mismo tiempo, tan adaptable a las circunstancias que le agitan en permanencia.

Con una variedad de paisajes ilimitada, dotados profesionales -artísticos y técnicos-, que con menor frecuencia se ven obligados a instalarse en la capital para trabajar en sus especialidades, un sólido y establecido tejido de empresas productoras, un trío de festivales rompedores y asentados (por no hablar del resto de certámenes que pueblan su geografía) y la guinda de este sabroso pastel, la recién creada Academia de Cine Andaluz y sus Premios Carmen, Andalucía tiene un plan de cine.

Tres directores de festivales, con distintos estilos (complementarios e imaginativos), Manuel H. Martín, José Luis Cienfuegos y Juan Antonio Vigar se han especializado en distintas cinematografías: en Huelva (el puente hacia Europa del cine latino), Sevilla (como puerta del europeo en nuestro país) y en Málaga (con el mayor y más diversificado despliegue del cine español).

La celebración del 25 aniversario del Festival de Málaga anuncia la definitiva consagración de un desacomplejado cine andaluz que sorprende, divierte y conecta con el público. Por eso, este año aún más hay que estar muy atentos/as a esta edición del Festival de Málaga que promete convertirse en mítica. Ahí quedan algunas citas imprescindibles.

1. La mejor selección oficial de los últimos años

De la habitual programación que intentaba conciliar crítica y público, el festival propone en su 25 aniversario un giro más autoral en su selección. Desde los ya rotundos éxitos, en solo los dos meses que va de año en los festivales internacionales de Rotterdam y Berlín, con Alcarrás, Mi vacío y yo y Cinco lobitos (con Susi Sánchez en el esplendor de todo su arte), hasta las voces más novedosas, La voluntaria’ The gigantes, Dúo o, mucha atención a esta película, A Vanishing Fog (Entre la niebla).

El cine andaluz también se presenta con su mayor músculo con La maniobra de la tortuga, segundo largo de ficción de Juan Miguel del Castillo (Techo y comida se llevó dos Premios Goya), en el anclaje social de Sin ti no puedo, de Chus Gutiérrez, o con la inspiradísima fotografía de Gris Jordana en Las niñas de cristal, de Jota Linares.

2. Unos premios honoríficos rompedores

Málaga será una fiesta. Lo que ocurre siempre cuando Los Javis están por medio. Javier Calvo y Javier Ambrossi, Premio Málaga Talent, directores, guionistas y productores, con todos los Premios Feroz habidos y por haber, han desacomplejado una buena parte de la industria hasta convencerla de la necesidad de apoyar historias íntimas y de colectivos minoritarios. Hoy en día la identidad no solo es cuestión de género, es el caballo de batalla de toda una sociedad que reivindica sus diferencias. Al final, todos somos distintos o, al menos, eso es lo que desearíamos creer.

Mercedes Morán, Premio Retrospectiva, y Sol Carnicero, Premio Ricardo Franco, son otros dos homenajes bien merecidos. Sin Sol Carnicero el cine español no hubiese sido el mismo y es el momento perfecto para rendirle sus merecidos honores.

Aunque el Festival de Málaga celebra cada año el séptimo arte nacional, en este aniversario ha decidido hacerlo en todo su esplendor atribuyendo el Premio Málaga – Sur al conjunto del cine español, representado por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España.

No solo estará esta Academia presente en el festival, desde el 21 hasta el 23 de marzo, también se celebrará el V Encuentro de Academias Autonómicas de Cine (Asturias, Aragón, Galicia, Comunidad Valenciana, Cataluña y Andalucía).

3. Documental y No Ficción: tierra de mujeres

Excelente programación la de la sección Documental, en la que el festival de Málaga recoge y afirma la realidad: el documental es el terreno ideal de nuestras mejores cineastas (las causas dan para un libro: ¿menor confianza de la producción en ficción que implica presupuestos mayores?, ¿mayor libertad creativa…).

En todo caso, esta sección será una de las importantes del año. En ella se darán cita: Carolina Astudillo, Alba Sotorra Clua (impresionante Francesca i l’amor), Irene M. Borrego (hipnótica La visita y un jardín secreto) y Laura Sisteró (ganazas de ver Tolyatti Adrift).

Belleza pura que se conjugan a la perfección con el universo del cine, El viaje de Julieta, Mario Camus según el cine’o la poesía de Emilio Prados, cazador de nubes.

4. Joyas ocultas

El Latinamerican Focus, este año dedicado a Costa Rica, esconde una deslumbrante pepita de Jorgen Ureña, Abrázame como antes. En la sección Afirmando los derechos de las mujeres adéntrate en terrenos Desobedientes: la historia de FEMEN en España, de Lara Alcázar y Reichel Navarrete. Y no te pierdas la sección oficial de cortos, magistralmente programada (cuatro propuestas complementarias: estado de alarma, confinamiento, distancia social y nueva variante), con la joya de la corona Lois Patiño por partida doble, El sembrador de las estrellas, y por otro lado, y a cuatro manos, Sycorax, con Matías Piñeiro.

5. Hasta la Unesco estará en Málaga porque ‘Somos diversas’.

Una edición mítica para perderse que no acaba ahí. El martes 22 de marzo se presenta Somos Diversas, que acaba de recibir el Premio Unesco a la Diversidad Cultural. Un proyecto de FIACINE (Federación Iberoamericana de Academias de Artes y Ciencias Cinematográficas).

La presidencia de esta Federación, en las arrolladoras personalidades de Azucena Rodríguez, Verónica Calvo y Constanza Arena (continuando con su extraordinaria labor por el cine chileno, en particular, y el cine en español, en general), espera que este proyecto “visibilice y tienda puentes entre las numerosas asociaciones de mujeres del sector audiovisual de siete países (Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, Guatemala, México y República Dominicana), pertenecientes a colectivos  indígenas, afro, LGBTIQ+, migrantes y cisgénero.

La oferta no puede ser más variada y apasionante. Así que vente con nosotros a Málaga y disfrutemos del festival juntos/as.


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