Manuel H. Martín encara su tercera edición como director del Festival de Huelva. Lo hace con una imagen renovada, nuevo nombre, una sección de comedias y con tres premios honoríficos dedicados a intérpretes andaluces: Ingrid García-Jonsson, Manolo Solo y Kiti Mánver. Se siente “privilegiado” de dirigir el festival de su ciudad natal y tranquilo de que la deuda que heredó el certamen de la gestión anterior se vaya a “liquidar entre este y el próximo año”.
Tres películas españolas se las tendrán que ver con Las herederas (que se llevó tres premios en Berlín y uno en San Sebastián), en su pugna por el Colón de Oro (Miriam miente, La noche de 12 años y El hijo del acordeonista) y el largometraje chileno Swing (Lucho Smok) inaugurará la 44ª edición en la Casa Colón, por cuya alfombra roja pasarán Mabel Lozano, Vladimir Cruz, Santiago Amodeo y las actrices de la serie de Netflix Élite Mina El Hammani, Ester Expósito y Liz Lobato.
¿Con qué espíritu afrontas tu tercera edición?
Yo me siento un privilegiado. Por muy difícil que a veces sea la situación, haces tu trabajo y lo disfrutas, intentando que los problemas se queden en el despacho. Cuando entras en la dirección de un festival, tienes que gestionar mucho. No te puedes rendir y no puedes retroceder y tienes que pensar en lo mejor para el festival y el equipo. Y levantarte cada día ilusionado, aunque la situación sea compleja.
Entiendo que te refieres a la deuda. ¿Cómo estáis gestionando la deuda que arrastra el festival?
Hemos intentado cuidar y reforzar la imagen del festival, sin dejar de lado la deuda. Los procesos de administración tienen su tiempo y afortunadamente a mi casi tercera edición se está solucionando y eso genera un ambiente de trabajo mucho más agradable. La deuda es algo que se está corrigiendo, se cumplen los plazos y se va a liquidar entre este y el próximo año. Espero que en los siguientes años podamos tener un crecimiento moderado.
¿Cuál diría que ha sido la evolución del festival desde que tomaste las riendas hace dos años?
Teniendo en cuenta que nos ha tocado una época complicada, he tratado de reforzar el trabajo en equipo, que todo el mundo se sienta acogido. Hemos cambiado el logotipo, para que sea más luminoso y su sol represente las horas de luz de Huelva. También hemos cambiado sutilmente el nombre, para que la ciudad tenga más protagonismo (De Festival Iberoamericano de Huelva a Festival de Huelva. Cine Iberoamericano). Además, hemos añadido la sección de comedia, para que atraiga a otros espectadores al festival.
El país invitado de este año es la República Dominicana. ¿Cómo definiría el cine dominicano?
Se trata de una cinematografía incipiente, que no solo genera cine propio, sino que atrae muchos rodajes. Es bueno compartir experiencias, tenemos un encuentro entre cineastas de aquí y allí, para que haya intercambio de ideas.
¿Es necesario redimensionar los festivales, como afirma José Luis Rebordinos, director del Festival de San Sebastián?
Nosotros hemos redimensionado el festival a las necesidades de programación. Hemos preferido concentrar sedes y tener menos proyecciones. Aún así hablamos de 200 proyecciones, que no es un número tan reducido, pero que atraiga mayor de público posible.
En este sentido, ¿la apuesta por la comedia es una manera de atraer nuevos públicos?
Las comedias fueron muy bien el año pasado y creo que es muy importante que para el publico que no ve tanta sección oficial o película iberoamericana es un buen reclamo. Los festivales son más importantes que nunca, las plataformas digitales hacen una función, es una experiencia estupenda. Aunque parezca que vamos a un futuro incierto, vamos al origen: tener buena programación, buscar al espectador y combinar una programación variada en sección oficial.
Los largometrajes ‘Diana’, ‘Veintisiete’, ‘La primera cita’, ‘Todos los caminos’ y ‘El pacto de los estudiantes’ compiten por el Juan Ramón JIménez. ¿Es importante que la sección de cine local, Talento Andaluz, sea competitiva?
Sí, para nosotros es importante promocionar tanto a los artistas internacionales como a la gente de nuestra tierra. En el premio de Talento Andaluz, que lleva el nombre de Juan Ramón Jiménez, añadimos un viaje a Guadalajara, para que ese proyecto pueda viajar y promocionarse en el exterior. Yo pienso que un festival en Andalucía debe promocionar el cine andaluz lo máximo posible.
Premiáis a tres actores andaluces en estadios profesionales muy diferentes: Ingrid García-Jonsson, Manolo Solo y Kiti Mánver. ¿Qué mensajes lanzáis?
El hecho de que sean andaluces, no quiere decir que sean locales, ya que los tres tienen una proyección nacional e incluso internacional. Buscamos que tengan un prestigio y una carrera y los tres lo cumplen. Hay que recordar más que nunca que el cine andaluz tiene muy buena salud. Por fin nos estamos dando cuenta de que es importante promocionar el talento de nuestra tierra, pero siempre tirando de prestigio.
¿Te ves dirigiendo las próximas ediciones?
Estoy contento con Huelva, con el equipo, con el respaldo de las instituciones y afortunadamente puedo compatibilizarlo con otras tareas, aunque ésta absorba la mayor parte de mi tiempo. Me quiero centrar mucho en esta edición. Han sido tres años de mucho trabajo y creo que habrá que valorar todo cuando termine esta edición, ver los resultados de esta edición y las exigencias que uno mismo se hace. Si se cumplen todos los objetivos que me he marcado y el ambiente es el que parece, estable, se valorará positivamente la continuidad. Lo importante es esta edición y descansar un poco, porque han sido unos meses muy complicados de trabajo y ver cuál va a ser el futuro y mi futuro aquí.