En los terribles primeros momentos de la crisis del coronavirus, aquellos en los que aprendíamos a “aplanar la curva” y en los que “el pico” era todavía un horizonte muy lejano, se impuso la insoportable angustia de tener que enfrentarnos a un escenario desconocido. Aguardaba un futuro inmediato que nadie era capaz de descifrar, básicamente porque cada día parecía que se derrumbaba otro de los pilares sobre los que se había levantado nuestro presente. En el mundo del cine, cerraban las salas de proyección, se aplazaban los rodajes y cada uno de los grandes festivales… comprobaba una y otra vez la posición que ocupaba en el calendario.
Por fechas, Berlín se salvó por los pelos, ¿pero y los demás? Digamos que tarde o temprano se rindieron a la evidencia: la imposibilidad de una celebración cuyas condiciones (esto es, miles de almas congregadas en el mismo espacio) remaban en contra de una “nueva normalidad” que pedía a gritos confinamiento y distanciamiento social. Y así fueron cayendo, cual moscas, algunas de las grandes citas del calendario cinéfilo. SXSW, Locarno, Karlovy Vary… incluso Cannes, el más grande de todos.
En estas circunstancias de pánico pre-apocalíptico, al menos nos hemos podido consolar con el surgimiento de alternativas que han convertido a la #CuarentenaDeCine en una experiencia no solo enriquecedora, sino más bien salvadora. En la Ciudad Condal hemos tenido el caso del D’A y del Docs Barcelona, dos certámenes cuyos equipos organizadores han tenido la suficiente cintura como para reaccionar a tiempo, y para asociarse con las plataformas online (en estos casos, con Filmin) para que las películas que ya tenían seleccionadas para sus respectivas nuevas ediciones, pudieran llegar igualmente a la audiencia.
Entonces, ¿y si esta es la solución? En espera de la reapertura de las salas de cine, bueno es el formato hogareño-digital. Con esta mentalidad nace We Are One, festival global online que estará disponible a partir de hoy, 29 de mayo hasta el 7 de junio, de forma gratuita en el canal oficial de dicha iniciativa en YouTube. La gracia, ya se puede avanzar, está en el gesto. En la creación histórica de un espacio -virtual- apuntalado por aportaciones de certámenes tan importantes como Tribeca, Annecy, Berlín, Cannes, Venecia, San Sebastián, Sundance, Locarno o Toronto.
Están todos los grandes sellos del sector y muchos más, juntados con el noble propósito de que la rueda festivalera no pare de girar, y contribuyendo cada uno con un programa de largos, cortos, series y encuentros entre artistas que podrán disfrutarse en abierto, pero por tiempo limitado. Hasta aquí, las buenas noticias (y que conste que el titular es realmente motivo de celebración); lo que pasa es que los peces gordos han preferido sumar de manera más bien simbólica.
Cuando tomamos conciencia de We Are One, algunos creímos (por aquello de ser ingenuos) que el que iba a ser un año festivalero perdido, se iba a salvar con esta iniciativa… y que con ella tendríamos ocasión de ver algunos de los títulos del cine de autor más esperados de esta temporada. Pero no, mirando detenidamente al catálogo, debo admitir que no pude reprimir una primera sensación de desilusión. Eran muchas las películas que esperaba ver ahí, y al final ninguna de ellas ha pasado “el corte final”.
La razón está en las interpretaciones optimistas que ahora mismo sí podemos hacer del calendario. Con la desescalada afianzándose en el Europa (toquemos madera cada vez que digamos esto), algunas de las grandes citas (Venecia o San Sebastián, por ejemplo) parecen reforzar su posición legitimándose en las fechas previstas de sus respectivas celebraciones, o sea, confinado en que para septiembre ya habitemos una normalidad más concurrida. Total, que los grandes nuevos tesoros del séptimo arte pueden esperar a entonces para ser presentados en pantalla grande.
El productor Saïd Ben Saïd anunció, antes que Cannes confirmara la cancelación de la edición de 2020, que la esperadísima Benedetta de Paul Verhoeven retrasaba su estreno hasta mayo de 2021… es decir, coincidiendo con las más que probables fechas de “LE Festival” del año que viene. Del mismo modo, el equipo de Thierry Frémaux, director artístico de la cita cannoise, ya ha anunciado que el 3 de junio anunciarán las películas que habían sido seleccionadas para esta 73ª edición “fantasma”, una serie de títulos que podrá lucir el logo de dicho certamen cuando por fin desembarquen en las salas de cine comerciales… y en las de otros festivales.
Así pues, las grandes mentes pensantes del mundillo opinan que la artillería pesada va a caer, en formato clásico, durante la recta final de este mismo año… o que también puede esperar al siguiente curso. Entonces, ¿en qué queda We Are One? En una especie de repesca de prestigio. En una muestra de buena voluntad (es poco pero es algo) que en cierto modo reafirma el “antiguo orden”, pero que por suerte nos da acceso a una colección de trabajos muy apetecibles. Películas y encuentros que en su día se nos pudieron escapar, pero que ahora podemos recuperar desde la comodidad confinada de nuestra casa.
Destaca, por ejemplo, el cortometraje Parsi, nuevo trabajo de Eduardo “Teddy” Williams, el joven director argentino que, después de firmar la magistral El auge del humano está llamado a encabezar a la generación que nos mostrará el futuro del cine. Sin salir de Argentina, el reverenciado Matías Piñeiro compartirá su cortometraje Rosalinda. También estará Mary Is Happy, Mary Is Happy, de Nawapol Thamrongrattanarit, uno de los autores más inquietos de la siempre estimulante cinematografía tailandesa.
Perlas todas ellas de temporadas pasadas y que, no obstante, nos ayudan a entender el presente de un arte que estará representado por estrenos tan prometedores como la extravagante comedia Eeb Allay Ooo!, del indio Prateek Vats, o Motorcycle Drive By, de David Wexler, documental dedicado al grupo musical Third Eye Blind, o Ricky Powell: The Individualist, de Josh Swade, otra pieza de no-ficción dedicada en esta ocasión al legendario fotógrafo que pone título a la propuesta, o el estreno de los cortometrajes de DreamWorks Animation, Bilby, Marooned y Bird Karma.
Ninguna de las grandes novedades que teníamos apuntadas en la agenda… pero al fin y al cabo para esto sirve también un festival de cine. Ha quedado claro que a We Are One vamos a ir descubrir; quién sabe si ampliar nuestra nómina de dioses cinéfilos. Aunque tampoco está de más recordar que aquellos que ya conocíamos van a esperarnos también, ahora en forma de encuentros y clases magistrales. Alain Delon y Zhang Ziyi, John Waters y Albert Serra, Bong Joon-ho y Song Kang-ho, Claire Denis y Olivier Assayas, Ang Lee e Hirokazu Koreeda, David Cronenberg y Viggo Mortensen… Estrellas que brillarán en la pantalla de nuestro ordenador, tablet o televisor.
