Piluca Querol, directora de la Andalucía Film Commission, comparte con nosotros una lista muy personal: diez de los rodajes cinematográficos que han dejado una marcada huella en Andalucía. De la legendaria Lawrence de Arabia (1962) a las más recientes Caníbal (2013) o La isla mínima (2014).
Lawrence de Arabia / Lawrence of Arabia (David Lean, 1962)
Es la única película de la lista en la que no he tenido la oportunidad de trabajar, ni siquiera había nacido. Si un día tengo la oportunidad de viajar en la máquina del tiempo, pediré estar en Carboneras presenciando esa espectacular entrada de caballos y camellos en la toma de Aqaba y en el Casino de la Exposición de Sevilla convertido en el salón de plenos del Ayuntamiento de Damasco, donde se materializa el fracaso de Lawrence de Arabia en su intento de unir a todas las tribus de Arabia en la lucha contra los turcos…
Hable con ella (Pedro Almodóvar, 2002)
Trabajar con Esther García de El Deseo es siempre un placer, y en esta ocasión fue un reto conseguir la autorización de la Iglesia para filmar una boda en la preciosa Ermita de Nuestra Señora de Araceli en Lucena, Córdoba.
Muere otro día / Die another day (Lee Tamahori, 2002)
Halley Berry en la Caleta, what else? Un rodaje lleno de anécdotas y en el que los protagonistas disfrutaron mucho.
Nadie conoce a nadie (Mateo Gil, 1999)
La primera vez que trabajaba con mi admirado productor Antonio Pérez. No se me ocurre mayor reto para una film commission que gestionar parte de las autorizaciones y permisos de rodaje para una historia tan atrevida con nuestras tradiciones.
La Isla Mínima (Alberto Rodríguez, 2014)
Cuando una localización da título a una película, cuando un lugar es un protagonista más y cuando la fotografía da origen a la historia.
800 balas (Álex de la iglesia, 2002)
Como dijo su director: “Un homenaje al mundo del especialista, pero, sobre todo, a la gente que quiere el cine y a esta tierra de Almería, que está en todos los momentos de la película, en los paisajes, en los personajes”. Nunca olvidaré que cada vez que llamaba a Jorge Guerricaechevarría me felicitaba por pronunciar su apellido a la primera.
Alatriste (Agustín Díaz Yanes, 2006)
En muy excepcionales ocasiones acompaño a los directores a localizar, y con Tano Díaz Yanes he tenido la fortuna de hacerlo varias veces. Bellísimas escenas en Úbeda y Baeza, ambientaciones a cargo de mi querido Benjamín Fernández. Con Alatriste además teníamos un reto, que el director conocía muy bien Cádiz y, aún así, tuvimos la oportunidad de descubrirle los interiores del Castillo de Santa Catalina. Estoy deseando de ver su próxima película rodada entre las provincias de Sevilla y Cádiz, Oro.
El corazón de la tierra (Antonio Cuadri, 2007)
Basada en la obra de Juan Cobos Wilkins, pudimos conocer un oscuro y dramático capítulo de la historia de Huelva, y que sigue siendo de rabiosa actualidad. En esta película que cuenta con ruta de cine disfrutamos del enorme contraste y maravillosa luz de las localizaciones onubenses.
Caníbal (Manuel Martín Cuenca, 2013)
Nuestro querido Antonio de la Torre nos atormenta y fascina en su papel de sastre recorriendo cada día la Carrera del Darro y con sus víctimas en Sierra Nevada o en las playas de Motril. Explica Manuel Martín Cuenca: “En la sierra rodábamos un equipo muy pequeño, sin electricidad, con luz natural que buscábamos y esperábamos, con un trípode y una cámara. Además rodar la naturaleza, integrarla en lo dramático, ¡me encanta!, sentí que no necesitaba nada más para rodar, para ser cineasta.”
El reino de los cielos / The Kingdom of Heaven (Ridley Scott, 2005)
Era la primera vez que trabajaba para mi admirado Sir Ridley Scott, a quien pudimos descubrir una localización excepcional, el Palacio Portocarrero. Impresionante presenciar su rodaje en el Alcázar de Sevilla y ver derramados litros y litros de sangre por sus suelos.