El director chileno regresa al festival de San Sebastián con su nueva película para inaugurar la sección de Horizontes Latinos, tras competir en la Sección Oficial del certamen en 2019 con ese magnífico poema en imágenes sobre el duelo y la separación, que era su anterior producción, Vendrá la muerte y tendrá tus ojos.
Cinco años después el cineasta no se aparta de uno de sus temas preferidos, el duelo. Sin embargo, se podría afirmar que, aún con mayor seguridad si es posible, su estilo se ha reafirmado. El “toque Leiva” se ha destilado hasta el encontrar el encuadre justo y el tempo perfecto para expresar y adecuar en imágenes los sentimientos más profundos de sus personajes.
José Luis Torres Leiva estructura su película entre dos paréntesis. Cuando las nubes esconden las sombras comienza y finaliza por una serie de planos que apelan a figuras básicas geométricas: el rectángulo, el cuadro y el círculo. Entre estas dos puntuaciones la protagonista de la película, una actriz que desembarca en un lugar distante y desconocido para rodar una película, deja de observar la realidad encuadrada por ventanas, puertas y dinteles.
En Puerto Williams, en la ciudad más austral chilena, la naturaleza despliega toda su potencia y esplendor. El rodaje se ha pospuesto y la actriz, sin nada que hacer, comienza a recorrer los paisajes de este territorio tan espectacular y a conocer a sus habitantes. Frente a este espacio natural no delimitado por ningún marco, en la protagonista comienzan a aflorar sensaciones físicas y sentimientos que pensaba superados.
Cuando las nubes esconden las sombras, que casi podría considerarse un díptico junto a Vendrá la muerte y tendrá tus ojos, aborda el duelo y cómo superar o asimilar una pérdida. En esta delicada tarea la empatía, humanidad y escucha hacia los otros se presentan como un bálsamo si no reparador, al menos, apaciguador. El inconfundible “toque Leiva” vuelva a brillar en San Sebastián.
Sin duda alguna, la mejor inauguración inimaginable de Horizontes Latinos para esta edición del festival. Por cierto, una sección prioritaria y estratégica del certamen, con algunas de las películas más fascinantes del Zinemaldia, a la que le vendría muy bien disponer de pases de prensa. Incluso algunas merecían haber sido incluidas en la Sección Oficial.