Goya 2020: Málaga consolida sus opciones como sede de los próximos premios

Málaga avanza para ser el año que viene la sede de los premios Goya 2020. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha reconocido este viernes que la ciudad andaluza es “una opción cierta” para la celebración de la 35ª edición de la gala de la Academia del Cine.

En cualquier caso, De la Torre ha puntualizado que la candidatura “no está cerrada aún”, apostillando que aunque se avanza “en esa dirección”, falta aún “contar con los apoyos necesarios de otras administraciones y del mundo privado, para poder cerrar los acuerdos”.

La consejera de Cultura, Patricia del Pozo, ha manifestado este viernes “todo el respaldo” de la Consejería a la celebración de la gala en Málaga y apunta que la ciudad tiene “muchas condiciones” para acogerlo, como “una cultura impresionante, un aeropuerto que funciona como un reloj, un AVE maravilloso y un clima espléndido”.

El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Bonilla, ya manifestó durante la gala en Sevilla que “Andalucía tiene capacidad para organizar los premios Goya cuantos años quieran”. Según Moreno, le comunicó al presidente de la Academia que deseaba que Andalucía “se convierta prácticamente en sede permanente de los Goya”, porque “tenemos grandes ciudades en Andalucía y me encantaría que se volviera a repetir el año que viene”.

Tercera vez fuera de Madrid

Se trataría de la tercera vez que los premios Goya viajan fuera de Madrid, algo por lo que viene apostando la Academia de Cine,  y la segunda consecutiva que lo haría en Andalucía, tras el éxito de la gala celebrada en el Palacio de Congresos de Sevilla. “”Desde hace unos meses, desde que se produjo la última entrega de los Goya en Andalucía, en la ciudad de Sevilla, planteamos nuestras aspiraciones en ese sentido. Eso lo conoce la Academia del Cine”, ha afirmado el alcalde de Málaga.

Los centros que se barajan para su celebración son el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga (FYCMA) y el Palacio de Deportes José María Martín Carpena. “Ambos son válidos, tenemos que definirlo con la Academia”, según el Ayuntamiento de Málaga.

La ciudad resulta, además, una opción especialmente atractiva por contar desde hace más de 20 años con un Festival de Cine Español (ahora Cine en Español, incluyendo así producción latinoamericana), respaldado no solo por el ayuntamiento malagueño, sino por Atresmedia y otras entidades públicas y privadas.

El regidor ha realizado estas declaraciones después de que El País revelara que la Academia ultima las negociaciones para que Málaga acoja los próximos premios.

No ha sido la única noticia: en 2021, coincidiendo con el centenario del nacimiento de Luis García Berlanga, la gala tendría lugar en Valencia, rompiendo así con el centralismo de los premios del cine español.

Daniel Ortiz Entrambasaguas, presidente de la asociación de productores de cine malagueños (Procinema), celebra que los premios tengan lugar en Málaga, “una ciudad de cine, que está de moda como plató de series y películas nacionales e internacionales y donde se celebra desde hace 22 años el Festival de Cine en Español”.

El presidente de Procinema abunda en que “la diferencia estriba en que existen empresas y productoras locales que desde hace unos años generan y crean contenidos propios. Algunas de ellas han sido nominadas a los Goya, como Sin fin (Producciones Transatlánticas), y premiadas como Azul y no tan rosa (Malas Compañías PC). Aprendiendo de errores en otras celebraciones pasadas, esperamos no sufrir ese menoscabo por parte de la organización”, a la hora de invitar al sector local a la gala.

Antonio Hens, productor malagueño que atesora un Goya por Azul y no tan rosa, considera que el hecho de que los premios se vuelvan a celebrar en Andalucía “es bueno para recordar que buena parte del cine que se hace en España es andaluz, tanto de producción como de talento. Además, Málaga es potencialmente el plató de Europa, con más de 340 días al año de sol y tenemos una forma de celebrar muy acogedora”.

Para Hens, los Goya en Málaga cerrarían “el broche del Festival de Málaga, uno de los grandes escenarios del cine español. Espero que vaya al menos tan bien como en Sevilla, que fue un éxito rotundo. Es un acierto que salga de Madrid y se lleve a otros sitios donde se hace muchísimo cine”.

“Es coherente que se celebre en Málaga”

José Antonio Hergueta, presidente de la asociación de productores PECAA (Plataforma de Empresarios y Creadores del Audiovisual Andaluz) y productor nominado a los Goya por Sin fin, ve  “estupendo y coherente que se celebre en Málaga. En los últimos años se ha comprobado el valor de Málaga no sólo como un sitio donde se rueda, sino un lugar desde el que contamos nuestras propias historias”.

Apunta, en cualquier caso, que “aunque siempre resulta delicado organizar un evento que consume tanto esfuerzo y dinero, todo lo que redunde en la visibilidad de la industria es una mejora”.

Ezekiel Montes, productor de cine malagueño y académico, cree que es “una buena noticia, una forma de continuar estableciendo relaciones con la industria nacional, como ya hacemos durante la celebración del Festival de Málaga, que se ha convertido en un referente internacional”.

Además, abunda Montes, “nuestra ciudad destaca en los últimos años por su marcada línea de liderazgo e inversión en turismo y cultura. Todo lo que sea seguir potenciando lo que ya tenemos afianzado y abrir nuevas lineas como la celebración de este evento, siempre es bienvenido”.

Andalucía, lugar de celebración del cine

Andalucía se ha convertido en los últimos años en un lugar de celebración de premios cinematográficos. Aparte de la celebración anual de los premios Asecan del cine andaluz, los primeros premios de ámbito nacional en acudir a Sevilla fueron los Forqué en 2017.

El año pasado, se cumplió por fin la larga aspiración de la capital andaluza para acoger los premios EFA del Cine Europeo en el Teatro de la Maestranza, una gala unida desde sus inicios a las nominaciones que, año tras años, se desvelan durante el Festival de Cine Europeo de Sevilla.

El verano pasado, la capital hispalense sorprendió con el anuncio de que la 34º edición de los premios Goya se celebraría en Sevilla, siendo la segunda vez en su historia que salían de Madrid. La anterior fue en Barcelona en el año 2000.

Precisamente aquel año, los Goya fueron muy andaluces, porque Solas, la película que impulsó hace casi 20 años el sector audiovisual de Andalucía, estaba nominada a 11 estatuillas y se terminó llevando 5 cabezones.

En declaraciones a El País, Mariano Barroso, presidente de la Academia del Cine,  ha recordado que se eligió Sevilla por reunir tres condiciones “fundamentales”: comunicación directa con Madrid, un espacio para una gala con más de 3.000 invitados y “una actitud acogedora de las instituciones locales”.

En la presentación celebrada en el Ayuntamiento de Sevilla el año pasado, Barroso destacó tres razones para celebrar la gala en Andalucía: el reconocimiento a la industria andaluza del cine, las facilidades ofrecidas por el Ayuntamiento hispalense y la necesidad de que la gala salga fuera de Madrid. “Tenemos unos espectadores muy exigentes. Hay que visitarlos, salir (de la capital). Es la Academia de todos los cineastas del Estado”, afirmó.

El anuncio se vio arropado por el sector del cine andaluz con productores como Sara Santaella, Gervasio Iglesias, Guillermo Rojas, José Carlos de la Isla, Olmo Figueredo o Arturo Menor; los directores Alberto Iglesias, José Ortuño; el compositor Pablo Cervantes; el director del Festival de Sevilla, José Luis Cienfuegos; el guionista Rafa Cobos; la directora de producción Araceli Carrero; el expresidente de Asecan, Javier Paisano; el  gestor cultural Eduardo Trías o la directora de la Andalucía Film Commission, Piluca Querol, entre otros.

El director Alberto Rodríguez afirmó el año pasado que veía “positivo que la Academia se mueva y haga partícipe a todo el mundo. Se ha aludido (en la rueda de prensa) a muchos profesionales que llevamos mucho tiempo trabajando desde el sur como una de las razones de que la gala venga a Sevilla. Es placentero que algo que comenzamos hace mucho tiempo y, que contra todo pronóstico (ha seguido adelante), sirva para que el cine se haga más visible”.