El Festival de Cine Africano de Tarifa traza en su edición de 2017 una alegre pirueta y termina como empezó: con el protagonismo de Félicité, la dura y al mismo tiempo vitalista historia protagonizada por Véro Tschanda Beya y dirigida por el franco-senegalés Alain Gomis. Este canto a la mujer africana continúa así su carrera triunfal tras haber ganado el Gran Premio del Jurado en la pasada Berlinale, todo un hito para una película africana.
La nota más sorprendente del palmarés de esta edición es quizá el premio a la Mejor Actriz para la protagonista de una película documental, la policía Honorine Munyole, conocida como “Mamá Coronel” y auténtica heroína de la protección a menores y la lucha contra la violencia sexual en su país, la República Democrática del Congo. El mote de la protagonista da título al filme, Maman Colonelle, producción franco-congoleña de Dieudo Hamadi.
El Premio a la Mejor Película Árabe es para el filme seguramente más arriesgado de toda la sección: Akher Wahed Fina (que podría traducirse como “El último de nosotros”) dirigido por el tunecino Ala Eddine Slim. Sin diálogos, cuenta la peripecia (a la que también le encaja el adjetivo de heróica) de un anónimo inmigrante africano a través del desierto y el mar, para llegar a la ansiada Europa.
El jurado, formado por el actor ydirector marroquí Faouzi Bensaïdi, el profesor Ikbal Zalila y el la artista visual egipcia Jihan el Tahri, ha reconocido como Mejor Documental a Atlal, del tunecino Djamal Kerkar, que toma una metáfora poética sobre las ruinas para hacer un retrato del pasado inmediato, la memoria y la esperanza de Túnez.
Los asistentes al festival también tenía posibilidad de elegir su película favorita de la sección Hipermetropía y se ha decantado por Wallay, una coproducción entre Burkina Faso, Francia y Qatar dirigida por Bernie Goldblat y que describe la vida cotidiana en Burkina Faso a través de la mirada de un chico de 13 años.
En lo que respecta al premio de la sección En Breve, elegido por un Jurado Joven, el cortometraje ganador ha sido Facing the Wall, historia de una chica etiope recluída en un centro de refugiados israelí. Y se ha decidido reconocer con una Mención Especial a Kindil El Bhar, trágica historia del linchamiento de una joven árabe en una playa.
Tanto en las secciones a concurso como en las no competitivas el FCAT ha permitido un año más dar a conocer en Europa un buen número de producciones africanas que no consiguen la distribución que merecen, cumpliendo así una labor fundamental en el acercamiento de los dos continentes y en la visibilización de las diferentes realidades africanas.
PALMARÉS de Hipermetropía (Sección competitiva)
Mejor Largometraje de Ficción:
Félicité (Alain Gomis, Senegal/Francia/Alemania/Bélgica/Líbano)
Mejor Película Árabe
Akher Wahed Fina (Ala Eddine Slim, Túnez)
Mejor Documental
Atlal (Djamel Kerkar, Argelia/Francia)
Mejor Actriz
Honorine Munyole, por Mama Colonelle (Dieudo Hamadi, Rep. Dem. Congo/Francia)
Premio del Público
Wallay (Berni Goldblat, Burkina Faso/Francia/Qatar)
PALMARÉS Jurado Joven de la sección En Breve (cortometrajes)
Mejor Cortometraje
Facing the Wall (Alamork Davidian, Etiopía/Istael)
Mención Especial
Kindil El Bhar (Damien Ounouri, Argelia/Estados Unidos/Kuwait)
