Por Ana Gámiz
La segunda jornada del Festival de Málaga. Cine en Español hizo honor este sábado a la nueva etapa que vive el certamen en esta vigésima edición, marcada por el cine ‘en español’. Así, se presentaron dos propuestas representativas: Selfie, una producción española al 100% y la coproducción hispano-argentina Nieve Negra, protagonizada esta última por uno de los homenajeados del festival, Leonardo Sbaraglia.
Con Selfie, su director, Víctor García León, deja ver que esta cinta es española hasta la médula, al mostrar en su historia un retrato del naufragio político de los últimos dos años en nuestro país. En palabras del realizador durante el encuentro con los medios: “Selfie es una alegoría subnormal de la vida política española”, para la que eligió el formato de docu-realidad.
Damos el salto hasta el otro lado del Atlántico, para encontrarnos con la propuesta de Martín Hodara, director de la película Nieve Negra. Una cinta que, al igual que la española, mezcla géneros para presentarnos la historia de una familia que arranca como un drama, hasta convertirse en un thriller que narra la historia de dos hermanos enfrentados por los secretos familiares.
En la rueda de prensa de la cinta se encontraban Laia Costa y Leonardo Sbaraglia que junto a Ricardo Darín y Federico Luppi conforman parte del equipo artístico de Nieve Negra, reuniendo así a un elenco de renombre internacional, tanto dentro de nuestras fronteras como en el panorama latinoamericano.
En una edición tan especial como la de este año, el guiño a los profesionales del audiovisual en español continuó en el segundo día Festival con el homenaje, precisamente, a uno de los protagonistas de Nieve Negra, el actor Leonardo Sbaraglia, que recibió el premio Málaga-Sur por su larga y exitosa carrera artística.
El porteño fue uno de los protagonistas desde primeras horas del día hasta llegar la noche, cuando tuvo lugar la gala de entrega del galardón en el céntrico Teatro Cervantes. La emoción llegó por partida doble a las tablas del teatro malagueño: a la alegría del actor por recibir el homenaje en Málaga, se unió la presencia de su madre, Roxana, que le hizo entrega del galardón.
Por su parte, la competición de cortometrajes sección oficial, animación y el programa dedicado a las producciones malagueñas, finalizó este sábado con la primera tanda de proyecciones, que contaron con la presencia de los directores. En su versión oficial y animación, los programas dejaron ver también la nueva cara del festival con producciones españolas y latinoamericanas.
La última parada del día posó su mirada en el cine andaluz. Los largometrajes Resort Paraiso, en la sección entrenos especiales, y Maniac Tales, en sección oficial fuera de concurso, mostraron el trabajo de dos producciones precisamente con sello malagueño. Ambas cintas se estrenaron en el marco del festival, con la presencia de directores, elenco y equipo técnico.
La sala 3 del Cine Albéniz abrió sus puertas para recibir al público deseoso de ver el segundo largometraje de Enrique García, un thriller trepidante que tuvo una gran acogida de la audiencia asistente al estreno. Por su parte, Maniac Tales cerró el día con la proyección en el Teatro Cervantes de una original historia de terror contada a través de cuatro episodios y unidas por un relato.
Imágenes: servicio de prensa del Festival de Málaga
